Con motivo del día en que la Iglesia Universal recuerda a San Juan Pablo II, patrono de nuestro Colegio, hemos vivido una intensa jornada festiva que ha dado comienzo con la celebración de la Santa Misa. En ella, los alumnos han podido venerar una reliquia del santo, cedida durante esta jornada al Centro por las religiosas de la Compañía de María de Valdemoro (Madrid).
Don Francisco Peña, Director Titular del Centro, ha presidido esta emotiva Eucaristía, en la que recordado a los asistentes la importancia universal del Papa Juan Pablo II, que marcó la vida de las personas de su tiempo. «Puso todo su empeño en desarrollar una filosofía basada en el personalismo: somos personas porque hemos sido creados a imagen de Dios, que es persona».
El sacerdote ha insistido en la idea de que el ser humano no es un ser aislado. «¿Os imagináis si estuviéramos completamente solos? No podríamos vivir ni crecer equilibradamente. Somos personas abiertas a los demás y abiertas a Dios. Y tal y como decía San Juan Pablo II, la esencia de cada uno reside en sus actos. Todos somos potencialmente buenos y todos estamos potencialmente abiertos a la belleza y a la verdad».
Don Francisco ha animado a los alumnos a preguntarse quiénes son, qué quieren hacer y hacia dónde quieren dirigir sus vidas. «Jesucristo es el único Salvador del mundo. Convenceos de esto. No encontraréis otro proyecto de realización humana si no es Jesucristo y es en nuestro encuentro con Él donde hallaremos la plenitud. En este Colegio tratamos de mostrároslo cada día: queremos que seáis hombres y mujeres con una voluntad firme y capaces de sobreponerse a la dificultad».