El experto en temas de familia José María Contreras ha ofrecido dos conferencias recientemente en el Colegio Karol Wojtyla: una dirigida a las familias de los alumnos de Primaria y Secundaria y otra orientada a las familias de niños de Infantil. El director titular del Centro, Don Francisco Peña, ha insistido en la importancia que tiene participar en las actividades propuestas por la Escuela de Padres.

Antes de las interesantes exposiciones de Contreras, el director general del Centro, Don José Pedro Fuster, ha explicado a los asistentes que todo lo que dice Contreras, cuyo currículum profesional es admirable, «es sentido común».
Padre de tres hijos y abuelo de nueve nietos, José María Contreras, ha advertido a las familias de las tres peores cosas que se le pueden hacer a un hijo: «En primer lugar, no educarlo. En segundo lugar, que a pesar de que lo quieran muchísimo el hijo no se sienta querido. Por último, lo peor que le puede pasar a un niño es que sus padres no se quieran». Al hilo de esto, Contreras ha señalado su postura frente a los problemas que surgen dentro del matrimonio («todos se pueden arreglar») y la forma de educar que predomina hoy en la sociedad. «Muchas veces se educa solo con el estado de ánimo».
«Educar es enseñar a las personas a utilizar la libertad»
Según José María Contreras, educar no es enseñar a comer o a hablar inglés a un niño. «Eso se llama urbanidad y formación. Educar es enseñar a las personas a utilizar la libertad. Es enseñar a amar lo que debe ser amado y a rechazar lo que debe ser rechazado».

Como el ser humano, apunta Contreras, «tiene la marca del pecado original», muchas veces se equivoca. «El ser humano, ante el error, tiene un espíritu de supervivencia que se manifiesta de dos maneras: a través del sentimiento de culpa y de la vergüenza». El problema es que ambos «siguen la ley de los rendimientos decrecientes. Si no se les dice a los niños con nuestra boca y con nuestro comportamiento lo que deben hacer, los chavales terminan cometiendo errores sin sentimiento de culpa ni vergüenza.
«Tenemos que explicar a los hijos el porqué de las cosas»
El ponente recalca la importancia de que los padres expliquen a los hijos el porqué para hacer las cosas. «La libertad tiene tres patas: los sentimientos, la inteligencia y la voluntad. Si un niño no halla el porqué para hacer algo, hará solamente aquello que le pida el cuerpo. Tenemos que decir por qué a los hijos».
Al termino de las conferencias de Contreras los padres se han mostrado muy satisfechos con las enseñanzas recibidas. Animamos vívamente a todas las familias del Centro a acudir a los siguientes actos incluidos en el programa de la Escuela de Padres.